EL LAGUNA YA SABE LO QUE ES GANAR
El Universidad logró su primera victoria en un partido trepidante ante uno de los gallitos de la categoría. El choque volvió a mostrar a un Laguna muy ferreo en defensa y con un Carlos Hernández en estado de gracia en labores ofensivas (14 goles). Los visitantes no aguantaron el tirón en los últimos instantes de partido y se quejaron amargamente de la labor arbitral.
UNIVERSIDAD LAGUNA 29 - 25 BEATRIZ HOTELES AMIBAL TOLEDO
El partido disputado este sábado en el Pabellón Central de la Universidad de la Laguna es buen reflejo de la igualdad que hasta ahora ha precidido los partidos del laguna como local. El comienzo del choque fue irregular, con mejor parcial para un equipo toledano que parecía entrar mejor en el partido.
Pero el Laguna reaccionó en tan sólo cinco minutos, y con un parcial de 4-1 se puso por delante en el marcador. De aquí hasta el final de los primeros treinta minutos el partido fue un toma y daca entre los dos conjuntos que no lograban imponer su juego, llegando a producirse muchas impresiones. Al descanso, el empate a 13, dejaba el partido abierto para el segundo acto.
Los primeros minutos de la reanudación fue un calco de la primera, con los pupilos de Rafael Sierra más enchufados. Lograron un ventaja de dos tantos (14-16 min 35) pero de nuevo los locales, con la inspiración goleadora de Carlos Hernández, se repuso y logró de nuevo ponerse con ventaja tan solo diez minutos después. A partir de este momento, los de Manuel Galván fueron siempre por delante en el marcador, con una gran defensa y un acertado ataque que poco a poco iba intimidando a su rival, que veía impotente como el partido se decantaba del lado local.
Al final, alegría desbordante de los universitarios, que suman su primera victoria de la temporada, y suman con este, su tercer punto, algo que los situa en la zona noble de la clasificación.
El Universidad logró su primera victoria en un partido trepidante ante uno de los gallitos de la categoría. El choque volvió a mostrar a un Laguna muy ferreo en defensa y con un Carlos Hernández en estado de gracia en labores ofensivas (14 goles). Los visitantes no aguantaron el tirón en los últimos instantes de partido y se quejaron amargamente de la labor arbitral.
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El partido disputado este sábado en el Pabellón Central de la Universidad de la Laguna es buen reflejo de la igualdad que hasta ahora ha precidido los partidos del laguna como local. El comienzo del choque fue irregular, con mejor parcial para un equipo toledano que parecía entrar mejor en el partido.
Pero el Laguna reaccionó en tan sólo cinco minutos, y con un parcial de 4-1 se puso por delante en el marcador. De aquí hasta el final de los primeros treinta minutos el partido fue un toma y daca entre los dos conjuntos que no lograban imponer su juego, llegando a producirse muchas impresiones. Al descanso, el empate a 13, dejaba el partido abierto para el segundo acto.
Los primeros minutos de la reanudación fue un calco de la primera, con los pupilos de Rafael Sierra más enchufados. Lograron un ventaja de dos tantos (14-16 min 35) pero de nuevo los locales, con la inspiración goleadora de Carlos Hernández, se repuso y logró de nuevo ponerse con ventaja tan solo diez minutos después. A partir de este momento, los de Manuel Galván fueron siempre por delante en el marcador, con una gran defensa y un acertado ataque que poco a poco iba intimidando a su rival, que veía impotente como el partido se decantaba del lado local.
Al final, alegría desbordante de los universitarios, que suman su primera victoria de la temporada, y suman con este, su tercer punto, algo que los situa en la zona noble de la clasificación.
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